miércoles, 24 de diciembre de 2008

JORGE DE CAPADOCIA ,SU PASO PÒR LA TIERRA

Jorge nacio en una familia cristiana de finales del siglo III. Geroncio, su padre, originario de Capadocia, servía como oficial en el ejército romano. Su madre Policromía volvió a su ciudad natal con su joven hijo tras enviudar, Lydda (luego Diospolis, actualmente Lod, en Israel). Aun así fue capaz de darle una buena educación a su hijo.
El joven al parecer siguió los pasos de su padre y se unió al ejército poco después de llegar a la mayoría de edad. Debido a su carisma subió pronto de grado, llegando antes de los 30 a ser tribuno y comes. Hacia esa época ya se le había destinado en Nicomedia como miembro de la guardia personal del emperador romano Diocleciano (quien reinó entre el 284 y el 305).
En 303, Diocleciano emitió un edicto autorizando la persecución sistemática de los cristianos a lo largo y ancho del imperio. Su césar Galerio fue el responsable de la decisión y continuaría la persecución durante su propio reinado (del 305 al 311). Parece ser que Jorge recibió órdenes de participar en la persecución, pero que prefirió dar a conocer su condición de cristiano y criticar la decisión del emperador. Un airado Diocleciano reaccionó ordenando la tortura que soportó sin emitir una sola queja, y posteriormente lo ejecutó.
Tras diversas torturas, Jorge fue decapitado frente a las murallas de Nicomedia el 23 de abril del 303. Los testigos de sus sufrimientos convencieron a la emperatriz Alejandra y a una anónima sacerdotisa pagana a convertirse al cristianismo, que pasarían a unirse a Jorge en el martirio. Su cuerpo fue devuelto a Lydda para ser enterrado.

ORACION MILAGROSA

Poderoso San Jorge, defièndenos en el combate de la vida, invoco tu defensa en éste día y en ésta
hora, para que cortes toda amarradura brujeria maleficio y todo lo que pueda perturbarme.
Glorioso San Jorge, en nombre de Dios, extiéndeme tu escudo y tus poderosas armas,
defendiéndome con tu fuerza y con tu grandeza, y que debajo de tí,
mis enemigos queden humildes y sumisos a Tí. Así sea con el poder de Dios,
de Jesús y del Divino Espíritu Santo
Amen.